Estoy realmente agradecida a Néstor Kirchner y al pueblo Santacruceño por haberme dado la posibilidad de ser partícipe activa de este proyecto de transformación nacional. Desde mi lugar en el Congreso Nacional he acompañado el proceso que hizo realidad las promesas de mayor justicia social, distribución de la riqueza, millones de puestos de trabajo, suba del salario y muchos otros logros históricamente postergados. Soy conciente también de que aún quedan muchas cosas por hacer y que este proceso que empezó con Néstor y continua con Cristina Fernández necesita de nosotros para profundizarse y seguir colocando a la Argentina como un país más igualitario, con trabajo y dignidad. En junio tendremos la posibilidad de hacer saber que apoyamos todo lo que hemos logrado. Es importante darle, no a este gobierno sino al rumbo político económico y social que representa, la fuerza y convicción necesarias para impulsarlo. El 2009 será un año difícil por la gran crisis mundial que, provocada desde las grandes potencias del mundo, querrá hacer mella en nuestro país, es necesario reconocer y que todos los argentinos reconozcan y valoren que esta crisis ha encontrado una Argentina inmersa en el mayor crecimiento económico sostenido de la historia de nuestra nación, pero también con una distribución de ese crecimiento mucho más equitativa y solidaria. Sin duda los cimbronazos de la crisis se harán sentir pero debe encontrarnos unidos y trabajando para evitar que esos golpes sean recibidos por los más vulnerables, los que menos tienen. Es por esto que les pido que sigamos acompañando a este modelo, que abracemos y defendamos lo que tanto nos ha costado conseguir.















Sabemos que, como dice Cristina, por ser mujeres nos es todo más difícil, pero lejos de victimizarnos muchas luchadoras como ella nos hacemos cargo del lugar que la sociedad nos dio.